OPUS MAGNUM. Cuaderno de notas de José Rodríguez-Guerrero |
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Et ita porro... Estoy rodando una entrevista para un programa de TVE que intenta dar a conocer el origen y evolución de las palabras. Al parecer están preparando una entrega sobre lenguajes secretos y se han interesado por la alquimia. Hace unas semanas se pusieron en contacto conmigo para ver de qué modo podían abordar el tema de una forma didáctica, que no resultase pesada, y que enganchara al espectador sin caer en el misterio barato. Hay que tener en cuenta que, según me dicen, el producto final no es para un canal temático, sino para un generalista como La1. Además, la idea inicial es emitirlo este verano en horario de máxima audiencia, lo que siempre obliga a tratar los temas de una forma entretenida, dinámica y lo más directa posible. Les he propuesto explicar dos cosas: por un lado las características del lenguaje alquímico, esto es, los tecnicismos, las metáforas y la iconografía; y por otro la relación de la alquimia con el idioma español actual, a saber, las palabras o expresiones alquímicas que podemos adoptar hoy día en cualquier conversación. Todo fue fenomenal hasta que los redactores del programa se pusieron a buscar localizaciones adecuadas para el reportaje. Ellos querían algo impactante a nivel visual, como un antiguo laboratorio, ya que la televisión se apoya mucho en la puesta en escena. Así pues, les pasé las direcciones de dos instituciones madrileñas que conservan reproducciones de sendos obradores alquímicos, ideales para ambientar una entrevista. Uno es el Museo de Farmacia Hispana, situado en la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense. El otro es el Museo de Farmacia Militar en la calle Embajadores. Nuestra sorpresa ha llegado cuando hemos comprobado que ambas instituciones pasan olímpicamente de todo, a pesar de ser lugares que, por su rara temática y nula publicidad, tienen sus salas vacías durante meses enteros. Va tan poca gente que es necesaria la cita previa para que se presente alguien a enseñar el lugar. Y digo yo...¡qué problema puede tener un museo de titularidad pública, generalmente desierto, para grabar un programa educativo.... de la misma televisión pública! ¡Pues parece que lo tienen, y se llama desidia! El Museo de Farmacia Militar pasa de contestar llamadas, correos, mensajes o cualquier cosa que han intentado los redactores. ¿Para qué responder? ¡Con lo bien que se está una mañana de junio mirando catálogos de viajes y tocándose los pies! En fin, qué bueno es tener en Madrid un museo muerto, al que no se puede ir, con ubicación cierta, personal asignado y un presupuesto anual que se deben gastar en pintaúñas y revistas del corazón.
El Museo de Farmacia Hispana por lo menos responde e intenta guardar las apariencias. Aunque casi es peor, porque para no enseñar las instalaciones alegan que no dejan grabar nada que no sea un monográfico dedicado al mismo museo. ¿Alguien entiende esta tontería de argumento? Yo no. La verdad es que su actitud apática no me extraña nada viendo que el lugar es guardado (escondido sería más adecuado) por un auténtico doctus cum libro llamado Francisco Javier Puerto Sarmiento. Se trata del típico académico español de “pura cepa”, de esos que se levantan cada mañana encantados de haberse conocido y pasan el día en su despacho, leyendo el Marca, sacando brillo a sus títulos institucionales y basando sus publicaciones en los nuevos datos aportados por confiados chavales de doctorado y post-doctorado de la Complutense que jamás verán sus densas tesis publicadas.
Finalmente optamos por grabar en los exteriores del formidable laboratorio construido por Felipe II en San Lorenzo de El Escorial, conocido en su tiempo como “la casa para destilar las aguas”. Se trata de un complejo arquitectónico de notable tamaño, independiente del cuerpo principal del monasterio, aunque adosado a su torre de la botica. Su estratégica situación aprovecha un manantial de aguas cercano. En su lado opuesto comunica con la llamada Casa de la Compaña, que en la actualidad alberga el Real Colegio Universitario María Cristina.
Este laboratorio había sido descrito desde
antiguo por varias plumas, como la del viajero Jean L'Hermite
(1560-1622), que nos dejó algunos diseños de su aparataje. Sin embargo
fue Mar Rey Bueno quien supo situarlo por primera vez dentro del
complejo escurialense. Si queremos valorar su magnitud debemos
compararlo con instalaciones similares de otras cortes renacentistas. Si
lo hacemos, Felipe II gana por goleada. * ¿Quieres hacer un comentario a esta noticia? Envía un correo con tu comentario y el nombre de la noticia en el campo de “Asunto”. Comentarios (6) * Comentario de Molitor |12.6.09|: Estimado Rodríguez: Por cierto felicidades, llegamos a unas fechas en la cuales haciendo honor a tu apellido "RODRÍGUEZ", algunos desearíamos. Las aseveraciones que haces de estos estamentos públicos (de todo hijo de madre conocidas) creo tienen solución (peligrosas). El organigrama de estas instituciones es muy simple (1 persona 1 jefe). ¿Y si fueras directamente al jefe? Quizás tuvieras alguna sorpresa. La vejez mueve muchas puertas. SALUDOS de MOLITOR. Jose Sánchez Agudo
*
Comentario de
José
Rodríguez-Guerrero
|16.6.09|:
Estimado Molitor: En primer lugar decirte que publico tu comentario
porque aparece tu nombre real en el correo que me enviaste. Yo lo de los
seudónimos y alias lo llevo mal, porque quiero que en este blog, y en mi
revista, todo el mundo se haga responsable de sus opiniones, yo el
primero. Sobre lo que propones, debo decirte que el problema de las
instituciones es de ellas y no mío. Si ellas dan un número de contacto,
deberían tener una persona competente en esa dirección. De todas formas
te diré que (por lo que me han comentado los de TVE), han hablado con
"altas esferas" de ambos museos y han resultado peores que
los meros administrativos. José Rodríguez
* Comentario de
Mar Rey Bueno
|12.6.09|:
¡Vaya foto de la Mansión de las Aguas, Jose! Creo que te la voy a
"piratear" para incluirla en mis charlas sobre el tema, pues nunca había
tenido una imagen tan estupenda como ésta. Creo imaginarme cuando la
tomaste, ¿fue el pasado septiembre? Mar Rey
*
Comentario de
José
Rodríguez-Guerrero
|16.6.09|:
Mar, desde la admiración que te profesa un simple lector
como yo que, modestamente, sólo me fijo en el contenido, y no en el
continente, porque no debo nada a los medios académicos; lo que
tienes que hacer es pasar de la gente mediocre. Nadie fuera de
España sabe quién es Sarmiento. Lo conocen en su casa, a la hora de
comer, y poco más. Por ejemplo, yo acabo de llegar de Italia, y si
hubiera mencionado el apellido "Sarmiento" en cualquier Departamento de
Historia de la Ciencia de allí, me habrían dicho: "Ah, María
Sarmiento, que fue a cagar y se la llevó el viento". Ella es
muuuucho más famosa. José Rodríguez
* Comentario de
Iván Elvira
|12.5.09|:
Saludos José, Iván Elvira
*
Comentario de
José
Rodríguez-Guerrero
|16.6.09|:
Gracias por tu interés Iván. El programa se llamará “Sacalalengua” y lo
quieren empezar a emitir en septiembre, en horario de máxima audiencia.
El dedicado a los “lenguajes secretos”, con la alquimia incluída, es el
número ocho de la serie. Está montado como un documental cultural y
divulgativo sobre el lenguaje, en el que tres reporteros recorren España
“buscando palabras”. Entrevistan a expertos en diferentes temas para
explicar el origen de términos o expresiones que hoy usamos todos
habitualmente. Yo les comenté que la alquimia también ha tenido sus
aportaciones dentro del lenguaje popular español: “destilar”,
“alambique”, “baño maría”, “serpentín”, “aguardiente”, etc. No sé qué
tal habrá quedado, pero la temática de la serie me pareció de lo más
curiosa e interesante. José Rodríguez
Ad úsum delphini. Otro año más me he pasado por la Feria del Libro de Madrid y de nuevo regreso con la impresión de que no hay nada interesante que se publique en español. Poco o nada tienen que hacer aquí las personas interesadas por los estudios serios sobre la alquimia o las prácticas afines: hermetismo, rosacruces, paracelsismo, pansofistas, etc. En cambio, no habrá ningún problema si lo que se busca es el esoterismo barato y la chapuza académica.
Por citar una cosa con algo de enjundia, puedo mencionar la traducción completa de la Fuga de Atalanta de Michael Maier (1568-1622), a cargo de Ediciones Atalanta. Existía en español una versión anterior de Ediciones Tuero (1989), con un estudio iconográfico de Santiago Sebastián, pero se limitaba a reproducir los emblemas y a traducir sus lemas, omitiendo los epigramas iniciales, el prólogo y los cincuenta discursos que dan verdadero sentido a la obra. Al margen de la alquimia, recomendaría el Diccionario de Mitología Griega y Romana, de Herbert Hunger y Christine Harrauer, traducido del alemán por Herder Editorial. También es destacable el primer volumen de las Obras Completas de Filón de Alejandría (20 a.C.-50 d.C), muy bien preparado por José Pablo Martín para Trotta Editorial. Filón resulta fundamental para entender el empleo de la alegoría como herramienta para armonizar diferentes sistemas de pensamiento, algo que fue muy habitual en el hermetismo y en la literatura alquímica desde muy tempranas fases. Antes de marcharme pasé por Patrimonio Ediciones para ver su nuevo facsímil del Splendor Solis, basado en el Ms. allem. 113, fechado en 1577, de la Bibliothèque Nationale de París. El trabajo de reproducción es bueno y viene acompañado de un estudio a cargo de Alejandro García Avilés y Carlos Espí Forcén, profesores ambos del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Murcia. El ejemplar de la feria ha sido preparado exclusivamente para su exposición, ya que el resto de la tirada no se empezará a entregar hasta septiembre de este año.
Curiosamente, otra versión del Splendor Solis, la correspondiente al manuscrito Harley 3469, fechada en 1582 y hoy conservada en la British Library, está siendo preparada por Moleiro Editor. Sinceramente, no entiendo la paranoia que les ha entrado los autores de facsímiles por editar todos la misma obra. Si se han creído que las diferentes versiones del Splendor Solis son una especie de “Beatos” de la alquimia, se equivocan de pleno. Lo único que hacen es fomentar una competencia estúpida y creo que así se comerán muchos de los ejemplares con patatas. Esta copia de Moleiro, por ejemplo, ya fue sacada a la luz por Kegan Paul en 1920, con comentarios del teosofista Julius Kohn, y es fácilmente adquirible en librerías anticuarias. Incluso las pruebas de imprenta y notas complementarias se conservan en los MSS.4853 y 4854 de la Wellcome Library de Londres. Ciertamente es una edición para esoteristas y de una calidad no comparable con lo que quiere hacer Moleiro, pero el manuscrito es ya muy conocido, con sobresalientes reproducciones en Internet, y pienso que no tiene sentido su publicación en casi-original. El facsímil más justificado del Splendor Solis apareció ya en 2005 a cargo de Wissen Media Verlag. Se trata del manuscrito 78D3 del Kupferstichkabinetts der Staatlichen Museen de Berlín. Contiene la versión ilustrada más temprana, fechada en 1532-1535, y viene acompañado de un tomo con excelentes estudios, muy difíciles de superar, a cargo de reputados especialistas en alquimia e iconografía: Ursula Götz, Michael Roth, Joachim Telle, Jörg Völlnagel y Jutta Zander-Seidel. La editorial Krewel-Werke de Colonia, publicó en 1972 otro facsímil, esta vez del MS. Germ. fol. 42, conservado en el Staatsbibliothek Preussischer Kulturbesitz de Berlín y fechado en torno al año 1600. Yo preferiría que viera la luz un facsímil de otro tratado alquímico ilustrado, como el magnífico ejemplar de la Aurora Consurgens conservado en la Biblioteca Universitaria de Praga, que reproduce el más temprano ciclo integral de ilustraciones de esta obra, muchas de ellas desconocidas para los aficionados a la alquimia y ausentes del célebre códice Rh172 de la Zentralbibliotech de Zúrich. Otro sencillo ejemplo sería el manuscrito Sloane 2560, de apenas quince folios deliciosamente ilustrados con los procesos de la obra alquímica. En fin, los casos serían innumerables, pero me temo que nos quedaremos con las ganas de verlos publicados. * ¿Quieres hacer un comentario a esta noticia? Envía un correo con tu comentario y el nombre de la noticia en el campo de “Asunto”. Comentarios (2)
* Comentario de
Mar Rey Bueno
|17.6.09|:
Querido Jose, Mar Rey
*
Comentario de
José
Rodríguez-Guerrero
|17.6.09|:
Evidentemente el tema de los facsímiles tiene mucho de antojo. Juegan
con las "philias" del bibliófilo. No obstante, si uno es despierto puede
encontrar un precio razonable. La copia del Splendor de
Patrimonio sale por
6000 eurazos y yo lo compré hace dos años (cuando todavía no estaba ni
medio proyectado) a un total ridículo, que prefiero no decir para no
comprometer al editor. Aquí hay que saber regatear y moverse entre
tiendas ya que, al fin y al cabo, te mueves entre vendedores de libros y
la competencia entre todos ellos es brutal. Tú misma lo puedes comprobar
en Iberlibro, o en su hermano mayor, Abebooks (mi gran favorito), donde
ejemplares un mismo libro pueden variar entre los 600 y los 60 euros,
según el parecer del librero de turno. Por ejemplo, hace poco compré el
Magyar alkémisták de László Szathmáry por apenas 25 euros, a un
librero canadiense que no debía tener ni idea de lo difícil que es
encontrar esta obra. José Rodríguez
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Acerca de este weblog
Opus magnus es
el nombre que he elegido para encabezar un pequeño cuaderno de notas,
cuyos contenidos están relacionados con el día a día de mi afición a la
alquimia. Incluiré en él una serie de comentarios, redactados todos en
un tono informal, que no tendrían cabida, ni sentido, en un texto
académico. Dicta philosophorum “Sabed que todo el misterio de la alquimia se contiene en tres máximas: La Naturaleza seduce a la Naturaleza; la Naturaleza triunfa sobre la Naturaleza; la Naturaleza domina a la Naturaleza”. seudo-Demócrito. (s. I d.C). Archivo 2009 2008 Mis Páginas Favoritas
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Alchemy Web Site Sobre el autor Una de mis grandes aficiones es el estudio de los textos alquímicos. En relación a este asunto, me encargo de editar la revista Azogue, y de formar una pequeña biblioteca que pueda servir a otras personas interesadas en la misma materia. Datos del autor (en inglés).
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